sábado

Despertares


Hoy desperté viendo el mar en éste rincón montañoso.


El mar que hace tanto no veo, huelo, toco y siento


Amanecí feliz. Esa felicidad que permite transportarte sin espacio ni tiempo.

Aproveché para transportarme a los lugares queridos, a mis lugares

Me reuní con gente querida, mi gente de siempre, los de ahora, los de mañana.

Mis sabores y olores preferidos todavía me acompañan.

Y con esta sonrisa casi tatuada en mi cara me digo una y otra vez:

                                              
- Espero no mal acostumbrarme


viernes

Con las alas desplegadas

     Merodeando almas ajenas

Desalojada de la noche

       Inquilina de sueños 




domingo

Desencuentro...

Escondió su rostro bajo la solapa y disimuló la flor que llevaba en su mano izquierda. 
Analizó cada cosa practicada frente al espejo y creyó que era lo correcto para decir en aquel encuentro.

Recordó las veces que la había invitado a tomar algo. Los no. 
Repasó aquella invitación de ella. El sí. 

...

Caminó medio escondido, como un ladrón. 
La tarde dormía ya sin sol.

Cruzó la esquina.

Ya allí, frente a la puerta volvió a repetir todo aquello que debía decir, sintió correr por sus venas sangre caliente, llena de valentía.

Un minuto, solo un minuto fue suficiente. 

Miró a su alrededor, nadie lo observaba.

Repentinamente dejó caer la flor, miró la luz de aquella ventana por unos segundos y volvió sobre sus pasos, marchándose.

Ya en su hábitat natural, su habitación de dos por tres, se sintió un verdadero cobarde. 

Esa noche lloró como quizás nunca lo había hecho.

Nunca más intento volver y nunca supo que, aquella noche, ella lo había esperado como quizás nunca lo había hecho.

                                                       Desencuentros, que le llaman.


Leído por ahí...


El hombre llega mucho más lejos para evitar lo que teme

                                                       que para alcanzar lo que desea